Un grupo de investigadores de la Universidad de Uppsala y Viena, realizaron una revisión de 24 estudios sobre la acción de los anticonceptivos en el cerebro de las mujeres. Mediante técnica de resonancia magnética, investigaron el efecto que tienen las hormonas sexuales femeninas a lo largo del ciclo menstrual.
Llegaron a la conclusión, que los tratamientos con anticonceptivos, tienen una marcada influencia sobre las áreas cerebrales que controlan el conocimiento y las emociones.
Este hallazgo quedó en el aire y con un interrogante abierto. Algunos Ginecólogos habían observado una cierta relación entre anticonceptivos y depresión, pero hasta entonces no se había publicado un estudio importante sobre esta cuestión.
JAMA-Psychiatry de noviembre de 2016, ha publicado un estudio basado en el The Danish Sex Hormone Register Study, para verificar si existe una relación entre anticonceptivos hormonales y depresión.
Se revisaron historias clínicas de 1.061.997 mujeres en edades comprendidas entre 15 y 34 años (media 24 años). Un 55,4% tomaban anticonceptivos hormonales. Se siguieron durante seis años. A lo largo de estos seis años se controló toda la medicación que se les prescribió.
Se encontró que, las que tomaban anticonceptivos, se les había prescrito un 30% más de antidepresivos (RR = 1,3) en relación a las que no los tomaban. Había algunas variaciones en función del tipo de anticonceptivo. Dieron mayor porcentaje de uso de antidepresivos, las tratadas con inyecciones de acetato de medroxiprogesterona (RR = 2,7). Las tratadas con implantes y parches transdérmicos (RR =2,0).
Los datos fueron más significativos en el grupo de adolescentes entre 15-19 años.
La conclusión del estudio fue: las mujeres que toman anticonceptivos hormonales, necesitan más antidepresivos en relación a las que no los toman.
La crítica que quizás se puede hacer al trabajo es que se basa en datos de historias clínicas. Es decir mujeres en edad fértil que tomaban o no anticonceptivos. Pero sin determinar a cuántas de un grupo u otro se les prescribió antidepresivos, tras un seguimiento de seis años. Por tanto, no es estudio clínico en el que se hubiera realizado un test psicológico previo, determinando la situación psicológica de base de cada una de las 1.061.997 mujeres. Aunque de haber tenido depresión, ya hubiera constado en su ficha médica que tomaban antidepresivos.
La conclusión del trabajo, es simplemente una llamada de atención a los Ginecólogos, cuando prescriben anticonceptivos hormonales.
Es recomendable programar alguna visita de seguimiento, con el fin de controlar posibles procesos depresivos. También tenerlo en cuenta antes de prescribirlos. A su vez en la anamnesis, preguntar siempre, si se ha tenido algún proceso depresivo. A la vez que evaluar su posible riesgo de depresión. Sin olvidar advertir a las mujeres, que si tienen algún síntoma de depresión, que consulten al Ginecólogo. Él puede valorar la situación y tomar la decisión más adecuada en cada caso.
Como ya nos hemos referido en muchos blogs, recordar que el tratamiento con anticonceptivos hormonales, aumenta el riesgo de trombosis en mujeres genéticamente predispuestas.
Por lo que seguimos insistiendo en la necesidad de realizar un test genético previo, antes de prescribir anticonceptivos hormonales. Y recordar también, que la obesidad y el tabaquismo multiplican el riesgo de trombosis.
Fonte: https://www.medicinapersonalizadagenomica.com/anticonceptivos-hormonales-depresion/#.WUgRg1XyvIV